Lucerna y Albert

Escritos en 1857 y 1858, estos dos relatos son un homenaje a la pasión de Tolstói por la música y están inspirados en episodios de su vida. En "Lucerna", ofrece evocadoras descripciones de la ciudad junto al lago y recrea en primera persona los conflictos de su protagonista, el príncipe Nejludov, quien es sacado brevemente de su tristeza por una encantadora melodía y restaurado a su puro amor por la vida: "¿Qué más se necesita? Todo es tuyo, todo es bueno...". En "Alberto", desarrolla la historia de un violinista de gran talento al que tuvo la oportunidad de escuchar en San Petersburgo y cuyo miserable destino lo conmovió profundamente, a juzgar por una entrada en sus diarios donde se refiere a él como un "genio maniaco". Dos relatos en los que brilla el prodigioso talento del gran escritor ruso para la observación y el detalle.