La tiranía sin tiranos

Esta obra escrita cuestiona la naturaleza del individualismo como fuente de daño autoinfligido, como si se tratara de un nuevo régimen, una tiranía sin tiranos en la que, quizás, los tiranos seamos nosotros mismos. / Nunca el mundo ha experimentado tantos avances y tanto respeto por la opinión pública, nunca ha habido tantas oportunidades de progreso y tan larga esperanza de vida entre muestras asombrosas de solidaridad y ternura. Si nos sorprende el grado de abandono y mezquindad que sacude a una parte de la población lo achacamos a una fatalidad consecuente con el tamaño ingestionable del planeta. Sin embargo, se amontonan los indicios y las certezas de que las existencias más acomodadas también se deterioran a marchas forzadas entre muestras de un individualismo cada vez más patente a nivel particular y colectivo. Este escrito se interroga sobre la naturaleza del individualismo como fuente de daño autoinfligido, como si de un nuevo régimen se tratara, una tiranía sin tiranos en la que, quizás, los tiranos fuéramos nosotros mismos.