El don de la siesta

Asociada a la pereza, la siesta contraviene un principio del mundo moderno: el impulso productivo. Sin embargo, este hábito se ha convertido en una herramienta fundamental de productividad, una rutina saludable e incluso una práctica interesante. Las siestas son un arte de descansar. Un evento capaz de frenar y transformar el ritmo actual. / Asociada con la pereza y la ociosidad, la siesta contraviene uno de los principios fundamentales del mundo moderno: la pulsión productiva. En los últimos años, sin embargo, este hábito se ha transformado en una herramienta central de la productividad, una rutina saludable, un imperativo del bienestar, e incluso una práctica cool, vendible y consumible. Frente a esa capitalización del sueño, este libro, a medio camino entre el ensayo y la memoria, defiende la siesta como un arte de la interrupción. Un evento excesivo capaz de frenar y transformar el ritmo desbocado del presente.